Nro. 32 - Shiver and Shake

Sé que si agarro una lapicera y una hoja me vuelvo loco.
Que el ardor del pecho son sentimientos enfermos.
Sé que si agarro una lapicera y una hoja los vuelvo locos.
Que la desesperación por gritar en el papel se convierta en arte.

¿Por qué tal ardor, tal desesperación, tal locura?

Entiende, soy humano.
Los humanos nos apasionamos. Y enloquecemos.
Todo por la misma razón.

Nunca me vas a revelar lo que hay adentro de tu cabeza, ¿no?

Mi cabeza tiene una puerta y está a simple vista.
Solo tenés que querer entrar.
Y deshacerte de tus limites.
Es como volar.

Me imagino en tu cabeza un mundo irreal.

Tan irreal como la imaginación.
Como la verdad y como la vida misma.
Es venenosa como el sentido del tacto.
Pero hermosa como un beso violento.

¿De dónde sale todo eso?

Del corazón, descontrolado.
De los deseos perversos y pervertidos.
Inmorales y tabú.
Es la vida, la escencia del ser.
Lo que queremos que sea irreal, pero no por eso
deja de ser real.

No tenemos poderes mentales.

Sí, los tenemos.
Para con nosotros mismos.
Saber controlarnos
o
saber descontrolarnos
depende de nosotros mismos.
Depende de tu amor y tu odio.
Depende de tu esencia.

¿Y vos por qué elegís descontrolar?

Porque soy un hombre que mira con otros ojos la vida.
Y sé que si no vivo ahora al punto de desgarrarme la piel,
sintiendo todo lo que de verdad merece la pena ser vivido,
no tiene sentido vivir.

Nro. 31 - San Telmo querido.


Quiero emborrachar mi corazón
para apagar un loco amor
que más que amor es un sufrir...

Era una noche tormentosa en Buenos Aires, de esas que provocan escalofríos aunque de frío no haya nada.
El caminaba cabizbajo, sufriendo el calor que guardaba el sobretodo que llevaba puesto, supuestamente para evitar mojarse.
Un sombrero cincuentón, un reloj de agujas que ya no andaba y los zapatos recién lustrados ya arruinados daban pena.
La cabeza sucia de una noche de alcohol, malas compañías y un tango que le recordaba sus angustias.
-¿En qué estaba pensando?- se dijo a sí mismo.
-¿Quién me mandó a meterme en todo este quilombo?-
Su cara mostraba furia, dolor, penas guardadas desde hacía ya muchas noches de alcohol, malas compañías y tangos angustiosos.
Paso lento para no hacer saltar el agua de los charcos en las ya desprolijas calles de su barrio, San Telmo querido. Carlos Calvo y Perú.
Paredes despintadas, puerta de madera alta, angosta. Buscar la llave e intentar embocarla en la cerradura era, a esas alturas, toda una hazaña pero de las que eventualmente se logran.
-Primero un pie... después el otro... Uno adelante del otro, uno a la vez, así uno no se cae- piensa intentando concentrarse.
-Enfocar la vista... Intentar caminar derecho... Aunque así denote la borrachera...-
Se saca el sobretodo, el sombrero cincuentón, deja los zapatos arruinados en un rincón y enfila para la heladera. La abre y se queda. Mirando al vacío, pensando en el vacío, apoyado sobre la puerta. Su cerebro sin coordinar lo que está pasando, nadando en whisky.
-¿Qué estaba buscando yo?-
Sigue mirando al vacío, pensando en el vacío. Hasta que el frío de la heladera empieza a congelarle la remera húmeda por la lluvia y opta por alejarse de allí.
Encaminado con una mano en la pared (porque no quiere perderse), va despacio hasta su pieza. A oscuras, mojado, con la habitación dandole vueltas. Y un tango angustioso resonando entre las paredes de su cabeza.
Cerrar los ojos es un sufrimiento porque entre las vueltas que da la cama y el cabello ondulado de ella la locura se hace inminente e inevitable.
Esa melena...
Esa boca...
Esa cintura...
Esos ojos, caprichosos, pícaros, deseosos...
El susto lo hace despertar de golpe, agarrandose fuerte de las sábanas como si fuera a caerse. Sudando frío.
Se intenta secar la transpiración con las manos y se da cuenta que las gotas que recorrían su rostro también eran lágrimas. Soñando con el dolor de ese amor destructivo, pérfido, venenoso.
Sentado en su cama, agarrandose la cara, tapandose los ojos, revolviendose el pelo con desesperación. Se levanta, apoya la mano en la pared y camina hasta la heladera.
Minutos después se lo puede ver con la cabeza sobre su brazo izquierdo, al borde de la mesa, una botella de whisky caída en el piso ya vacía. El pico roto por el golpe y marcas de violencia penosa por toda la habitación.



Nro. 30 - Dream has become her reality

Perdí mi totem
en un sueño perfecto.
Quise perderlo
porque quería quedarme.
Aceptaría la eternidad
sumergida en el limbo
esperando por un tren.
Sé dónde espero
que el tren me lleve
pero no puedo estar segura.
No importa,
estaríamos juntos.
Envejeciendo,
creando un mundo,
nuestro,
de felicidad.

I miss you more than I can bear... but we had our time together. And now I have to let go...





Ariadne: My subconscious seems polite enough.
Arthur: Well wait, it'll turn ugly. No one wants to feel someone else messing around their mind.

Nro 29 - Atormentación

Ella se mira al espejo
Ella se piensa reflejada
Ella cree que quien le devuelve la mirada
es ella misma.

Ella no entiende
cómo pasan ciertas cosas,
cómo se hace para evitar
que los sueños la acosen,
cómo dejar de sentir
así no se asusta
ni se preocupa.

Ella se mira al espejo
y le pregunta a ese reflejo
dudas que recoje del viento
pero que no quiere tener.

A veces se pierde
en ilusiones
sin salida.
En realidades
desprendidas.
En imagenes
ya rendidas
al tiempo,
al dolor,
al olvido
que no llega.

Ella piensa,
siente
y cree
que está todo bien.
Pero no logra descifrar
por qué su sistema
inmunológico
viene fallando tan a menudo.
¿Estará somatizando?
¿Somatizando qué?
Si piensa,
siente
y cree
que está todo bien.

Quiere concentrarse
y vivir entre la belleza.
Quiere crecer y desprenderse
de las sombras que la rodean.
Ella quiere tranquilidad.

Nro. 28 - Stupidity Tries

Yo quise cambiarte, porque pensé que era lo mejor para vos.
Vos nunca entendiste cómo soy, ni quisiste hacerlo realmente.
Yo intentaba patear el palito que sostiene tu débil -metalizada- estructura psicológica.
-Para que entendieras y disfrutaras.
Vos pensabas que yo intentaba destruírte.

Hoy caigo en la cuenta.
Con razón..

Yo era el círculo deforme en tu hoja cuadriculada.




Y bueno, será cuestión de convertirnos en mejores personas.


  • The enemy is within
    Don't confuse me with him
    The truth is otherwise
    Stupidity tries

Nro. 27 - Camino a casa

05/09/10
4:53am

Tu vida es un remate
de historias usadas
Tu cuerpo es un desierto
de amores ahogados
Multipropósito de entusiasmadas sensaciones.

Hacés carne pensamientos
que deberías desechar.
Te parece cruel pero es inevitable.
Vos no lo podés cambiar.
El mundo es redondo,
eso ya está.

Frágil, como tus ganas de llorar,
te conservas desprendida en tu realidad ideal.

Sueña y abraza a tu muñeco de trapo
para intentar despertar una vez más.

Nro. 26 - Malas costumbres.


Una vez me creí toda la historia de un rey.
Empiezo a decifrar qué estoy haciendo mal
chocandome con la verdad

La esperanza es una Invensión Moral
es la única defensa ante la verdad
que es siniestra y fatal.

Acostumbrado a mentir.
Acostumbrado a reír.

Innecesarias expresiones, palabras y necesidades
te agobian cada día al no saber qué buscás.
Ni qué necesitás.
Igual estás tranquila y eso te encanta.
Encontraste un punto de relajación que luchás por mantener
y eso en tu mente y en tu vida es un paso gigante.
Considerás que creciste un poquito y estás orgullosa
y bien
y feliz
con vos misma.

Nro. 25

Selah. Paradox, humour, and change.

Siempre le dijeron
"Las cosas buenas que hacés
vuelven."
y, a pesar de todo lo malo,
no dejó de creer.

A veces le era fácil
aferrarse a esa idea
Otras veces lloraba
tomada de la mano del diablo

Me cuenta,
con su cara hundida en la almohada,
que el amor le dio alas
pero eran de papel.
Me dice,
cerrando fuerte los ojos,
que creyó que las cosas iban a salir bien.
Que escaló, casi hasta la cima,
y cayó..con alas de papel..

No me mira
pero me habla
y me confiesa
cosas que nadie sabe
y ahora nadie sabrá.
Que tiene miedo,
que le duele el corazón,
que le cuesta respirar,
que no come,
no duerme,
está sola y nadie la puede ayudar.

Sin parar de sollozar
murmura
que está hundida,
vacía,
que jamás pensó
que la iban a lastimar así.
Nunca se le ocurrió,
confiando en que lo bueno volvía,
que las cosas iban a terminar así.

Tiene un aura oscura.
Vive escondida de la gente.
No quiere más dolor
pero es lo único que puede sentir.
Está hundida,
vacía,
y quiere desaparecer.



I'd rather be dreaming than living
Living's just too hard to do
It's chances not choices
Noises not voices
A day's just a thing to get through
Living's just too hard to do

I'd rather be dreaming than talking
There's nothing to hear or to say
With ears covered mouth closed
The world is opposed
Nothing gets in or away
There's nothing to hear or to say

I'd rather be dreaming than thinking
Thoughts are small comfort to me
Dreams might be pretend
But at least dreams end
And I just can't stop thinking you see
Thoughts are small comfort to me

I'd rather be dreaming than sleeping
Just sleeping you're just as well dead
In dreams I can fly
In dreams I don't die
That's why I lie here in this bed
Just sleeping you're just as well dead

I'd rather be dreaming


Nro. 24 - Breathless




Relojes imparables
Sonoros
Que envejecen

Vidas largas
Peligrosas
Antibalas

Deseos prohibidos
Ocultos
Inocultables

Vidas cortas
Aburridas
Monótonas

Laberintos interminables
Eternamente desesperanzadores
Enloquecedores


"¿Qué queremos?"
Resuena en su cabeza esa pregunta incansable
Busca en libros
en películas
en canciones
alguna respuesta
que la ayude a salir
a entender

a darse cuenta
a dejar de soñar
a empezar a pensar

a dejar de ser tan (in)crédula


Obtiene
  • soledad
  • desconcierto
  • tristeza
  • confusión
  • locura
  • vida

Nro. 23 - Selah

"Siéntate y escucha.
Detente y piensa.
Mira y considera.
Presta atención a tu alrededor.
Tomate unos minutos de paz interna,
levantate y acciona tu mente,
tu cuerpo,
tu alma.

Escucha y siéntate.
Piensa y detente.
Considera y mira.
Tu alrededor está en constante movimiento,
en constante cambio.

Mira, escucha, piensa.
Detente, siéntate y considera.
Que la vida es necesaria.
Que los cambios son necesarios.
Que la demás gente es necesaria.

Invade tu mundo,
transformalo en tu ideal,
sé feliz.
Invade el mundo de los que te rodean,
ayudalos con su ideal,
hazlos felices.

Evita la locura.
Evita los enojos.
Evita las angustias.
Evita la violencia.
Evita pensar,
creer,
engañarte a ti mismo
que el mundo está en tu contra.

Creeme, no hay nada peor
que vivir desolado
por el miedo.."

Se quedó mirandolo a los ojos,
con los suyos llorosos.
Sosteniéndole la mano
sobre la mesa que los separaba
mientras lo oía a él suspirar.

Una vez más, las esperanzas se esfumaban.
Las mentes de ambos discutían en su interior.
Empuñaban armas poderosas
contra sus emociones y deseos.
Todo los desmoronaba,
bien profundo entre las sombras
de ese maldito individualismo.

Nro. 22 <- Balada para un




Salió un día a caminar bajo el sol.
Radiantes estaban ambos. Felices de verse otra vez.
Se miraban con cariño, disfrutándose y acompañándose, pensando en que jamás se volverían a separar.
Ella bailaba melodías que reflejaban colores en su lírica
mientras él la iluminaba.
Paciencia, amor puro, en bruto.
De ese que los recién enamorados se prometen devotamente.
Pero nada es para siempre dicen por ahí..

Y tienen mucha razón..

Se amaban, de eso no había duda. Pero la luna también está en su derecho a aparecer. Y no iba a dejar que se lo quitaran.
Pelearon por su amor. Pero el sol es viejo ya.
Sus fuerzas se agotaron rápidamente, porque la noche lo apagó.

Ella maldijo las horas, los deseos y el amor.
Y se perdió en sus propias lágrimas
a la luz de la luna.

Nro. 21 - Extinguish me

.




De vez en cuando ella reía, porque de vez en cuando soñaba con paisajes paradisíacos, con aromas de flores hermosas, con un cielo siempre azul lleno de nubes con formas tontas.
Encerrada en su cuarto de grises paredes, escribía en la suciedad poemas para amar que luego borraba con lágrimas hasta dejarse naufragar.
Perseguía sus deseos cual hada emborrachada. Intentaba escapar pero nada la salvaba.
Cuando la lluvia golpeaba esa única ventana se sientían los suaves sollozos dentro de su alma.

Ver su cara era ver un fantasma. Perdida en sentimientos que jamás sintió. Muere un poco cada día y se desgasta intentando vivir.
Encerrada en su cuarto de grises paredes, cierra los ojos y se rinde a soñar.

Acerca de mí

Mi foto
Cara Y Seca. Chaotic Neutral. Sedada lo suficiente.

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